Tratamiento para Ofensores Sexuales
El Modelo de las Buenas Vidas (GLM, por sus siglas en inglés) es un enfoque para el tratamiento de delincuentes sexuales orientado a la rehabilitación y basado en las fortalezas. Desarrollado por Tony Ward y sus colegas, el GLM se fundamenta en la creencia de que ayudar a las personas a construir vidas significativas y satisfactorias puede reducir el riesgo de reincidencia.
En lugar de centrarse únicamente en la gestión de riesgos y el control, el GLM enfatiza la importancia de apoyar a los clientes para que logren sus objetivos personales y desarrollen identidades prosociales. El modelo se basa en la idea de que todos los individuos aspiran a ciertos «bienes primarios» (por ejemplo, relaciones, autonomía, paz interior, placer, creatividad), y que el comportamiento delictivo a menudo surge de intentos de alcanzar estos bienes de maneras inapropiadas o dañinas.
Los principios clave del GLM incluyen:
Dignidad y agencia humana: Los infractores son vistos como capaces de cambiar y dignos de respeto.
Enfoque en bienes primarios: El tratamiento ayuda a los clientes a identificar sus objetivos de vida centrales y a encontrar maneras saludables y prosociales de cumplirlos.
Planificación de casos individualizada: Las intervenciones se adaptan a las fortalezas, necesidades y valores personales de cada persona.
Integración con la gestión de riesgos: Mientras se construye una «buena vida», el modelo también aborda factores de riesgo dinámicos (por ejemplo, regulación emocional, distorsiones cognitivas, intereses sexuales desviados) para prevenir futuros daños.
En general, el GLM fomenta el desarrollo de habilidades, recursos y relaciones positivas que contribuyen a una vida significativa, reduciendo así la probabilidad de reincidencia de una manera más holística y compasiva.
Tarifas del Programa para el Tratamiento de Ofensores Sexuales
Group schedule offender accountability april 2025
